Aún pienso en ti cada día, creo que aunque logre vivir siete vidas te seguiré recordando.
A veces espero con ansia que llegue la noche, soñar contigo, para reencontrarnos en la oscuridad, porque tengo preguntas pendientes, abrazos pendientes, asuntos pendientes contigo. Sin embargo, cuando te veo en sueños, casi no existen palabras, aunque pareces tan real como la última vez que hablamos.
Quiero despedirme y no quiero por miedo a volver a perderte.
Tu que guardas tantos secretos, ¿dónde estas ahora? Me lo pregunto pues te noto cerca, ocupas todos mis pensamientos y sin embargo, has dejado un vacío tan hondo que me arde el alma y se congela mi corazón cuando escucho tu nombre.
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