martes, 30 de enero de 2018

270. DOS EXCLUSIVOS SOMBREROS, de José Aneiros

La rivalidad entre la condesa Mademoiselle Veronique y Lady Anabel era por pura envidia. Aunque las dos nobles más bellas de la corte pretendían los favores del conde Fernand, ese no había sido motivo suficiente para un enfrentamiento directo. Sin embargo, la llegada al baile de la duquesa Lady Anabel con el mismo sombrero que la condesa se presentó como un ataque directo a la altanería de esta última. Torturada por su vanidad, Mademoiselle Veronique lanzó su pañuelo al rostro de la duquesa, quien no dudó en retarla con floretes por la primacía del copete palaciego.
A la mañana siguiente, entre la neblina del alba y ocultas entre unos arbustos, se encontraron las duelistas acompañadas de sus respectivas madrinas. Acordadas las reglas de la disputa, las contendientes se desvistieron del torso para arriba, previniendo que un trozo de tela pudiese penetrar en las heridas, pero permanecieron con los sombreros puestos.
Tras varios acometimientos, Lady Anabel hirió a su oponente y apoyó la punta del florete a su cuello. El orgullo de la condesa le hizo arremeter de todos modos hacia la vencedora, con la única intención de desfigurar su bello rostro, provocando así su propia muerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.